Hoy después de mucho tiempo he vuelto a sonreir, a soltar una carcajada, y lo más hermoso es que le he sacado una sonrisa a mi hija. En medio de una mañana gris y lluviosa esperando el autobús, la sonrisa ha fluido de nuevo en mi boca. A veces recuerdo el torbellino de persona que he sido, una faceta he tenido aparcada durante un montón de tiempo. Las circustancias de la vida hacen que las personas dejen de ser lo que eran, pero poco a poco hay que resurgir como el ave fénix. Hay que abrirse de nuevo a la vida. Cuesta muchísimo, incluso llegas a pensar que la vida se para contigo.
Cuando en tu alrededor te comentan que hay que tener paciencia, y estas cansada de oír tantas veces la misma palabra, hay que ponerse en la piel de uno para saber el infierno que estás pasando.
Siempre siempre... a la vida una sonrisa.
Cuando en tu alrededor te comentan que hay que tener paciencia, y estas cansada de oír tantas veces la misma palabra, hay que ponerse en la piel de uno para saber el infierno que estás pasando.
Siempre siempre... a la vida una sonrisa.